Preamplificador de fono Aesthetix Rhea
The phonosman
Hace un tiempo andaba yo pidiendo opinión a un amigo sobre lo que debía poner en mi tarjeta de presentación. Ahora que está de moda todo lo inglés, debería poner salesman le comenté con ironía, claro está que al final no lo hice. Pero ahora lo tengo claro, la denominación que me corresponde es phonosman, porque no salgo de un phono y ya estoy metido en otro, parece que es mi especialidad. Claro, como en mi cabeza siempre hay un vinilo dando vueltas, necesito amplificar y ecualizar constantemente…
Bromas aparte, el previo de fono es un elemento primordial en cualquier sistema analógico. Un equipo que realiza unas funciones específicas aportando una serie de características importantes a nuestro sonido final, de modo que se hace necesaria una cuidada selección a la hora de buscar el componente ideal para cada caso particular. Quizá los fabricantes piensen que sus creaciones son neutrales, que ofrecen un sonido natural y equilibrado, libre de toda coloración o exceso de análisis, aunque nosotros, los retorcidos aficionados, somos capaces de realizar las más heterogéneas combinaciones de componentes y cables con tal de conseguir nuestro sonido ideal. Al final, aquel componente que se suponía neutral, resulta que ahora endulza nuestro sistema o, al contrario, lo hace sumamente analítico. Por lo tanto, mi consejo es asegurarse mucho antes de comprar, oír el producto si es posible en nuestro propio sistema, y para eso contamos con una abundante red de distribuidores y tiendas en nuestro país.
Hablando de distribuidores, espero que ya conozcan a nuestros anfitriones, Arts Antiqua Audio. Una joven empresa que está haciéndose un hueco en este difícil mercado de la única manera posible, marcando la diferencia. Xubing Zhu y Jorge Castellano, cabezas pensantes de esta empresa, son unos incansables buscadores de la excelencia musical, lo que les ha llevado a seleccionar una serie de marcas del más alto nivel. Me consta que son verdaderos amantes de la música y de las buenas grabaciones, y su objetivo es conseguir una experiencia musical total a través de la confección de sus sistemas musicales. Esta filosofía perfeccionista ha llevado a la firma a distribuir marcas como Kondo, un nombre mítico entre los aficionados de todo el planeta, pero conscientes de que no todos nos podemos permitir estos niveles de excelencia, Arts Antiqua Audio ha decidido incluir en su portfolio productos más “asequibles”, como los de la italiana Aqua o la estadounidense Aesthetix, entre otros.
Para quienes todavía no la conozcan, Aesthetix es una empresa fundada por Jim White en Moorpark, California. Nuestro anfitrión se inició en el audio de alto nivel en 1990 dentro de la conocida Theta Digital, aunque su verdadera pasión siempre fue lo analógico, así que siguió investigando por este camino hasta que finalmente diseñó su primer previo de fono a válvulas en 1994. Ese año fundó su propia empresa y pronto vio la luz el Aesthetix Io, que con mejoras y modificaciones ha sabido cosechar abundantes premios a lo largo de sus más de 20 años de existencia. La marca ha ido creciendo hasta completar su catálogo con una serie de componentes que se organizan en dos series, la prestigiosa Júpiter y la más accesible Saturno. A esta última pertenecen los preamplificadores Calypso, Janus y Rhea. Este último es nuestro invitado, un preamplificador de fono a válvulas que ha sabido conservar lo mejor de su hermano mayor, pero con un diseño más compacto y asequible.
Descripción
Exteriormente el Rhea presenta un diseño muy funcional, un panel trasero con grades posibilidades de conexión, un frontal atractivo desde el cual se puede acceder a todas las funciones del previo, a través de unos pulsadores de diseño que imitan el logo de la marca y una cubierta superior que puede ser fácilmente retirada, para la colocación o cambio de las válvulas. Puede parecer sencillo, pero esta pieza se une al resto del chasis por una especie de velcro industrial. El resto del chasis se compone de placas de aluminio anodizado perfectamente ensambladas sin tornillería a la vista.
Realmente el Rhea es un verdadero juguete audiófilo. Posee dos pares de salidas –2 RCA y 2 XLR– y tres entradas, cada una de ellas puede ser ajustada en carga y en ganancia. Pero eso no es todo, porque estos ajustes son almacenados en la memoria para cada entrada, y todavía hay más, ya que estas funciones pueden realizarse cómodamente desde la posición de escucha mediante el mando a distancia suministrado. Lo que les digo, un verdadero juguete del más alto nivel que además cuenta con la función de desmagnetizador para cápsulas MC, que para más inri, puede ser activada mediante el control remoto. Ya les hablé en anteriores artículos de esta función especial que cada vez va cobrando más presencia en los fonos actuales, y simplemente recordarles que en teoría la cápsula absorbe algo de la carga de sus imanes y ese proceso de magnetización hace que la bobina sea menos sensible a las fluctuaciones del surco. La desmagnetización viene a solucionar este problema mediante una señal de audio, la cual se desactiva automáticamente. Aesthetix recomienda realizar este proceso semanalmente, y aunque no existe una gran diferencia, sí que es cierto que se percibe una mayor claridad, más notable en las voces y en las frecuencias altas.