Un motivo inexcusable para apostar por la “Hi-Res” con elegancia
Estamos ante una de las fuentes digitales de la era de Internet más interesantes y con mejor relación calidad/precio del momento. Un producto decididamente precioso en lo estético que es complementado por una potencia en funcionalidades y prestaciones sencillamente estratosférica, y más aún si tenemos en cuenta el precio por el que es propuesto. Pero todo tiene su explicación, y en el caso protagonista del presente banco de pruebas la encontramos en un pedigrí cuyo punto de partida se remonta a hace más de una década con el lanzamiento al mercado -2013- del modelo NODE original. Un producto con el que su creador, Bluesound, marca integrada en el potente grupo canadiense Lenbrook, dio el pistoletazo de salida de un sistema operativo y una “app” de gestión que desde entonces no han dejado de evolucionar. De ahí que en su condición de declinación más elaborada del concepto NODE, el NODE ICON incorpore un cúmulo de soluciones de ingeniería que lo convierten en excepcionalmente atractivo se mire por donde se mire, empezando por un “núcleo duro” -doble DAC, salidas analógicas balanceadas- destinado a satisfacer a los aficionados puristas ávidos de introducir la “Hi-Res” digital de última generación en su particular “mix” de contenidos de música. De ahí la homologación Roon Ready y la posibilidad -opcional- de añadir el sistema de calibración de salas Dirac Live, sin olvidar el atractivo de la compatibilidad con contenidos de audio multicanal codificados en Dolby Digital, la capacidad para configurar sistemas multisala sin cables o la imaginativa y solvente tecnología “Achromatic Audio Amplifier”, alias AAA, de THX para la escucha con auriculares.
Un maridaje sublime de vocación audiófila y espíritu “lifestyle”
¡Nada como una idea de base lograda para garantizar el mantenimiento de una relación calidad/precio fuera de lo común incluso en un campo tan competitivo como el del audio doméstico de alta calidad! Reconozco que no me he tenido que exprimir el cerebro para escribir estas líneas, pero si echan un vistazo a la cantidad de componentes de Alta Fidelidad, High End incluido, que han pasado a mejor vida por una concepción inicial con fisuras o extremadamente “cerrada”, presupongo que entenderán por dónde quiero ir. Y digo esto porque cuando un servidor de ustedes más bien “pasaba” -en esto ya he corregido el tiro… rectificar es de sabios- del audio “internáutico” el primer NODE -creo que lo vi en el certamen Munich High End- me llamó la atención por su elegante minimalismo formal, la potencia de su “app” de gestión y su muy favorable precio. Que luego el pequeño Bluesound se convirtiera en una de las opciones favoritas de no pocos especialistas de renombre de nuestro país -y presupongo que también de otros- para ofrecer el nuevo audio digital a sus clientes me dio que pensar. Y así llegó a mis manos la posibilidad de analizar -hablamos de mediados de 2021- el NODE 3, una electrónica que me pareció sensacional pese a que siempre he sido hombre de “pepinos” más “gordos”, como por ejemplo el preamplificador estereofónico con streamer incorporado M66 de NAD que probé para ustedes a finales de agosto de 2024.
“Este es el reproductor de música en red de referencia de Bluesound, diseñado para llevar la mejor experiencia de escucha a cualquier sistema de audio de altas prestaciones”. “La plataforma de streaming de música multisala BluOS, el mejor ecosistema del mundo para audio de alta resolución, es la columna vertebral de las prestaciones de los productos Bluesound.El NODE ICON integra servicios de música, por lo que escuchar a su artista o su lista de reproducción favorito es muy simple.” Con estas líneas se presenta nuestro invitado en su escueto y muy bien pensado manual de instrucciones online, que se complementa con una hiperpráctica, esta vez en papel, Guía de Inicio Rápido destinada sin duda a los más alérgicos a las operaciones de configuración. A destacar asimismo la elegancia y calidad del embalaje.
Para seguir la tradición, he intentado glosar el máximo número de particularidades posible del NODE ICON en la ficha técnica que hay al final del artículo, por lo que en las líneas que siguen intentaré concentrarme en lo que considero más relevante. Así, hay que señalar en primer lugar que el Bluesound es gestionado por un procesador ARM Cortex A-53 de cuatro núcleos con frecuencia de funcionamiento de 1’8 GHz por núcleo, una potencia que en el ámbito práctico significa una velocidad de acceso y una fluidez –léase ausencia de interrupciones y posibles retrasos y/o caídas- extremadamente robustas a la hora de, por ejemplo, de acceder a nuestra cuenta de Qobuz o TIDAL o cualquier lista de reproducción que tengamos. Pero también para agilizar el funcionamiento de una configuración multisala basada en componentes Bluesound que tengamos repartida por nuestra casa. Por otro lado, la compatibilidad del NODE ICON con sistemas de domótica de Lutron, RTI, Crestron, ELAN, URC y Control4 permite integrarlo cómodamente en instalaciones personalizadas complejas.
Pero estamos en hifilivemagazine y, aunque la potencia de gestión de una fuente digital importa, y además mucho, no basta por sí misma para satisfacer las demandas de los usuarios más exigentes. Es aquí donde entran en juego el alma purista de Bluesound y la condición del NODE ICON como streamer de referencia de la marca, con una sección DAC arquitectura doble monofónica protagonizada por dos de los novísimos “chips” de conversión D/A estereofónicos premium SABRE ES9039Q2M de ESS Technology y el esquema de reducción de “jitter” –“corrección de errores de sincronismo durante la conversión de digital a analógico” para ser exactos, que en la práctica viene a ser lo mismo- QRONO d2a de MQA Labs. Una tecnología que igual llega tarde a la vista del paulatino abandono de esta interesante codificación digital por parte de algunos servicios de música online relevantes; aún así, bienvenida sea porque en audio de alto nivel cualquier astucia que aspire a mejorar la calidad sonora es bienvenida.
De nuestro invitado habría que subrayar asimismo su capacidad para descodificar grabaciones en Dolby Digital, algo que tiene mucho sentido si consideramos la entrada HDMI eARC que incorpora. Del NODE ICON me gustaría apuntar igualmente, como señalaba en la presentación de este banco de pruebas, la presencia de una tecnología muy novedosa desarrollada por la estadounidense THX, uno de los “padres” del Cine en Casa: la AAA, siglas de “Achromatic Audio Amplifier”, en su versión “Frontier” (existe una de superior nivel, de nombre “Vanguard”). Desarrollada específicamente para su empleo en entornos físicos cerrados como son el habitáculo de un coche o a escucha con auriculares, como en el caso que nos ocupa, asegura, en palabras de sus creadores, “La experiencia de escucha definitiva con auriculares proporcionando la más alta fidelidad del momento en audio con unos niveles de ruido, distorsión y consumo de energía infinitesimalmente bajos.” Lo hace a través de la linealización extrema de la sección de la circuitería de amplificación, maximizando a la vez la potencia de salida; por otro lado, al estar toda la electrónica “AAA” concentrada en un módulo, su integración en productos tan compactos como el analizado o el grueso de amplificadores de auriculares disponibles en el mercado es muy fácil.
Una firma sonora sorprendentemente cálida
Escuché el NODE ICON en mi equipo “gordo”, y la verdad es que me quedé prendado con la placidez de su sonido. Cierto que el cable de alimentación es muy básico, y al no incorporar el Bluesound conector IEC la opción de mejora en este sentido -me viene a la memoria el magnífico Wireworld que acompaña al “energizador” a válvulas de mis veteranísimos y “musicalísimos” Stax Lambda Signature- no se puede contemplar. Por el contrario, si aproveché las dos salidas analógicas balanceadas, en este caso vía cable Siltech. Otro tema importante a señalar es que, en mi opinión, el producto analizado está muy bien resuelto, lo que significa que “mejorarlo” vía adición de un DAC externo implicaría perjudicar su extraordinaria relación calidad precio… es mi opinión, claro.
Por lo demás, la operativa a seguir antes de entrar en materia es la estándar, siendo los pasos clave al respecto la descarga y posterior activación de la BluOS Controller App -para dispositivos Android en mi caso- y la adición del Bluesound a mi red doméstica. Escuché grabaciones varias de Qobuz y TIDAL, servicios ambos a los que estoy suscrito y que han conseguido que haya escuchado más música en mi coche durante los últimos seis meses que en toda mi vida. Empecé con la cautivadora “Song of the Wind” del álbum Caravanserai, uno de los trabajos míticos de Carlos Santana, seguido del tema “Invisible Limits” del alucinante álbum Stratosfear, una gema firmada por Tangerine Dream. Me impactó en ambos casos el perfecto contorneado de los graves, contundentes y profundos a partes iguales, así como la perfeta separación de los mismos y el resto de instrumentos. En el caso de la zona alta, la emotiva guitarra de Carlos Santana y la rica percusión que la acompaña formaban un dúo perfectamente integrado en el que las metalizaciones brillaban totalmente por su ausencia. Siguiendo con grabaciones de leyenda, en este caso el inmortal -¡fue grabado en 1959!- “Kind of Blue” de Miles David, de nuevo es el carácter fluido del sonido lo que marca la pauta de una restitución en la que el aire que rodea los instrumentos contribuye a reforzar su poderosa personalidad. En este aspecto concreto, el NOVA ICON exhibe una tímbrica genuinamente High End pese a que la dinámica podría ser más expansiva. En lo que respecta a las voces, hay que reconocer que el sentido del equilibrio que caracteriza al Bluesound encaja como anillo al dedo con la versión de la popular canción de la Qhändeliana” opera Rinaldo “Lascia ch’io pianga” interpretada por mi admirada mezzosoprano italiana Cecilia Bartoli porque la precisión tonal es maravillosa.
Para finalizar
Hiperbonito, fantásticamente construido -en aluminio anoizado- y con una inteligentemente dispuesta “botonería” en el “minipanel” inclinado -lo que la hace fácilmente accesible y visible- que une sus paneles frontal y superior, el NOVA ICON logra situar el concepto ICON de Bluesound en la categoría de icono -hay que reconocer que se lo ha currado porque el camino recorrido hasta llegar aquí ha sido largo- gracias a la excelencia combinada de su circuitería de audio, el sistema operativo BluOS, la BluOS Controller APP, una conectividad bien ideada y funcionalidades como la THX AAA. Todo ello propuesto por un precio que lo hace de lo más apetitoso.
Ficha Técnica
- Configuración: reproductor de música en red “Hi-Res” homologado Roon Ready y Dirac Live Ready con gestión mediante sistema operativo propio y “app” BluOS Controller App.
- Relación señal/ruido: 129 dB en las salidas balanceadas y 121 dB en las salidas no balanceadas.
- Archivos compatibles: MP3, AAC, WMA, WMA-L, OGG, OPUS, FLAC, MQA, ALAC, WAV, AIFF, MPEG-4 SLS, DSD y Dolby Digital.
- Codificación digital nativa soportada: PCM hasta 24 bits/192 kHz y DSD hasta DSD256.
- Conectividad digital: entrada y salida óptica TosLink; salida coaxial; entrada USB-C; entrada USB-A (para unidades de almacenamiento externas); salida USB-A; entrada HDMI con eARC; Bluetooth 5.2 con aptX Adaptive.
- Conectividad analógica: entradas y salidas no balanceadas con conectores RCA; salidas balanceadas con conectores XLR; salida para subwoofer; 2 salidas de auriculares para clavija de 6’34 mm situadas en los paneles laterales.
- Potencia de salida del amplificador de auriculares dedicado: 160 mW a 16 ohmios, 235 mW a 32 ohmios, 56 mW a 250 ohmios y 23 mW a 600 ohmios.
- Dimensiones: 220x84x193 mm (An x Al x P).
- Peso: 2’23 kg.
- Precio de venta al público recomendado: 1.099 euros
- Importador: www.sound-pixel.com