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FOCAL CLEAR MG

Restyling de un producto perfecto

Hace tiempo que deseaba probar para la revista un auricular de esta marca. Desde que comenzó con la fabricación de auriculares, en principio en la gama media con modelos como el Spirit Classic, dio señales de que sería un fabricante serio: fiable por su buen hacer material e interesante por su sonido. Ya por entonces despertó mi interés y puse atención a lo que iban sacando.

Cuando dieron el salto a la gama alta, con la creación del modelo Utopía, confirmaron las expectativas creando un nuevo referente en el sector, que todavía hoy permanece como tal. Desde entonces han ido sacando al mercado nuevos modelos en diferentes gamas, centrándose poco apoco en las altas. Desde hace un tiempo poseo uno de sus primeros modelos, el Elear. Me desplacé a una tienda especializada probando los Elear y Clear de la época, y poco después me hice con ellos. Son uno de mis equipos preferidos, y los disfruto desde entonces casi a diario. Su corrección, naturalidad tonal y dinámica han hecho que, en cierta medida, cambie un poco mis gustos en esta afición, y han desplazado de forma notable a otros modelos que poseo y usaba habitualmente.

Ahora nos llega este modelo, el Clear MG, una revisión o restyling del Clear que probé entonces en tienda y que ya me impresionó muchísimo. Tanto que me parecía realmente complicado que en tan poco tiempo la marca decidiera sacar un modelo nuevo. He comprobado, no obstante, que el Clear original aún se mantiene en venta y en producción, y sigue disponible en la propia web del fabricante sin que exista una diferencia de precio significativa entre ambos modelos.

Deduzco, por tanto, que no es un modelo destinado a sustituir al anterior, sino más bien una alternativa de mercado que el fabricante ha visto tal vez necesario, o al menos apetecible, ofrecer al aficionado. Vamos a ver cómo lo ha hecho Focal, en qué medida este cambio de modelo aporta algo mejor, o al menos diferente, al espectacular modelo anterior.

PRESENTACIÓN Y CALIDAD MATERIAL

Focal ha entrado fuerte en este aspecto desde el principio. Ya desde sus primeros modelos, con un presupuesto mucho más ajustado en la gama media, puede decirse que fue ejemplar en todos los aspectos: cajas, accesorios y calidad de construcción. Ahora mismo, y considerando los modelos que conozco, creo que se puede decir que son sencillamente el camino a seguir, y que otras marcas bien podrían tomarla como ejemplo por diferentes razones, especialmente las de carácter práctico.

El auricular que analizamos se entrega en una caja de base de cartón con revestimiento textil. En ella encontramos todos los accesorios del producto, manuales y documentación. Esta caja servirá para guardar el equipo si no lo vamos a usar en un periodo largo, o para transportarlo de forma puntual, pero no es de uso frecuente. Aun así, ya es de la calidad de las cajas que habitualmente encontramos en este sector como estándar para el guardado después de cada uso.

Focal, además, ofrece una pequeña y bien diseñada funda de transporte que se adapta a la perfección a esta caja antes descrita, pero que ya de por sí nos sirve para guardar y transportar el auricular y los cables en su uso diario. Es todo un ejemplo de cómo ajustar una funda al tamaño de un auricular que, siendo de gama alta, ya es grande de por sí, pero que en conjunto queda prácticamente como un equipo  semi-portátil.

En las imágenes podemos ver que internamente el auricular queda perfectamente sujeto, ya que la funda está hecha a medida casi al milímetro, de forma que difícilmente nos servirá para ningún otro modelo. El compartimento es resistente y además podrá almacenar los cables sin que entren en contacto nunca con el auricular. Mención aparte merece la caja de los cables, realizada también con mucho mimo y a medida.

Los cables son de una calidad muy alta, y su aspecto estético está muy cuidado, tanto en los conectores, con las debidas serigrafías funcionales y detalles de la marca, como en el propio textil del cable, con color y texturas a juego con el resto de los detalles estéticos del auricular. Entregan un cable SE y otro balanceado con conector grande de 4 pins, lo más habitual en el sector de gama alta para esta configuración. Los conectores son de tipo jack mono en las copas, y su conexión y desconexión es sencilla y muy cómoda. Además, al ser un tipo de conector prácticamente universal permite hacerse con cables de otras marcas sin problema.

Los materiales del auricular son muy selectos. Toda la estructura del auricular es metálica, así como sus uniones y refuerzos. La diadema está enteramente revestida en piel natural, con microfibra en la zona de contacto con la cabeza. Las copas son de un material plástico en su carcasa base, la tapa es una maya metálica muy fina y con muchos relieves, en la que se insertan a la perfección el anagrama de la marca y la nomenclatura del modelo. Todo está acabado a un nivel que impresiona a simple vista y mejora al contacto natural, ya que además de ser lujoso es sin duda también resistente. Las almohadillas son de microfibra perforada, ofrecen un confort extremo y transmiten buena durabilidad por su tacto y densidad.

La ergonomía es también excelente. El auricular tiene peso, podemos reconocer que se encuentra entre los de mayor peso en su rango, y aun así su encaje es perfecto, y gracias a su buen diseño se deja usar en escuchas prolongadas sin problema, disimulando notablemente los 450 g del conjunto. Es, por tanto, el auricular más cómodo en relación a su peso que he probado.

Cada detalle, material, color, textura y pulidos con alternancia de brillo y mate están muy conseguidos y estudiados para dotar al auricular de un acabado que mejora notablemente al anterior modelo, que era en este aspecto claramente más austero, sin desmerecer en calidad constructiva.

En general creo que estamos ante uno de los auriculares mejor fabricados y diseñados del mercado, y que se sitúa en un punto de referencia material para cualquier otro rival de su sector. El estilo de este último modelo creo que ha incidido más en este aspecto de artículo de lujo que refleja en cada detalle. No puedo decir que sea materialmente mejor, pero sí que sin ninguna duda transmite una apariencia de nivel superior.

Es muy difícil encontrar alguna pega. Tal vez se podría haber rebajado un poco el peso, es lo único en lo que otros modelos de la competencia lo mejoran objetivamente. Y por decir algo más, el cable SE lo han fabricado en una longitud muy corta, 1.20 m en total, seguramente para hacerlo más cómodo si se usa desde un reproductor portátil. Esto lo encuentro un poco ilógico en un auricular de esta gama y capacidad técnica, ya que, aunque, como veremos más adelante, permite sin problemas este tipo de uso, no dejará de hacerse por lógica en un entorno privado y tranquilo, y un cable más largo permite un uso más lógico con equipos estacionarios.

RENDIMIENTO SONORO

El auricular me llegó a casa sin estrenar, perfectamente precintado. Esto es algo que, de entrada, hace mucha ilusión, pero que también significa que necesitaremos un tiempo de rodaje lógico para conocer a fondo su verdadero potencial. Y en este caso me toca advertir a los interesados: el rodaje de este auricular ha sido largo, más de lo esperado. Que nadie se preocupe por esto: podemos disfrutar del auricular desde el primer momento, pero iremos notando algunos cambios a mejor con el tiempo.

En la propia web del fabricante ya advierten que los transductores, tanto de cajas como de auriculares, requieren en todos los casos de un tiempo de uso para que sus partes móviles adquieran la elasticidad adecuada para ofrecer su máximo rendimiento. Además, insisten, el plazo es variable en función del uso, y establecen un tiempo prudencial de unas 50 horas. Creo haber necesitado más, llegando holgadamente al doble.

En todo momento he tenido al lado como referente comparativo el Focal Elear, lo que me ha ayudado bastante a calibrar los sutiles cambios que han ido produciéndose durante el rodaje. El Clear MG se muestra de entrada como un auricular de extraordinaria capacidad técnica. Es un auricular de carácter suave, con cierta tendencia a la calidez en conjunto a pesar de ser, por su resolución, transparente con los detalles.

El grave es muy envolvente y llega muy abajo. Es generoso, diría que un punto más de lo que podríamos considerar neutro. Esto difiere de lo que yo recuerdo de su anterior hermano, el Clear, que muestra un grave más contenido y seco. En el modelo actual el grave es, al mismo tiempo que más presente y profundo, también un punto más refinado y musical. Este cambio, que sin ser dramático se nota de inmediato, va a ser una constante en todos los aspectos del auricular.

La gama media es también un punto más cálida que la de su predecesor, y tiene una presencia más directa y cercana. Con cuerpo y muchos matices tanto en resolución como en textura, se muestra claramente dominante en la escena en todo momento, y transmite un carácter material y realista a la reproducción que probablemente sea el principal rasgo distintivo del auricular. Diría que, en su parte alta, la gama media ha sido también ligeramente suavizada, como para ser más amable de lo que sería con un carácter neutro. No pierde la naturalidad de conjunto, ni suena en ningún momento artificial o extraño, pero si suave y elegante. Es en este punto donde el auricular ha mostrado mayor diferencia con su predecesor, más incluso que en la zona grave, y también la parte que más ha ido evolucionando con el rodaje.

De entrada, la gama media se ofrecía suave, para poco después de unos días de uso y rodaje continuo se vuelva más oscura. Puede sorprender lo que voy a decir, pero ha habido momentos en los que me sorprendía lo aparentemente oscura y cálida que podía parecer, incluso comparada con el Elear que tenía como referencia y que, sin duda, tiene un carácter más cálido que su hermano mayor.

Con el tiempo, sin embargo, y con una buena dosis de paciencia, he podido ver cómo se ha ido abriendo hasta mostrar toda la transparencia e intensidad que esperaba en este modelo, siendo finalmente una de las mejores y más impresionantes gamas medias que he escuchado nunca.

Por arriba el auricular se muestra siempre muy detallado, estando en este sentido en lo más alto que uno puede encontrar en el mercado. El agudo nunca se muestra agresivo, en ninguna grabación, incluyendo las más ásperas y difíciles que he podido probar. Tiene también esa pequeña pátina de suavidad y elegancia con la que han caracterizado a este nuevo modelo, y resulta menos agresivo que el anterior Clear, un poco en consonancia con lo que he contado de su gama media, pero sin llegar nunca a parecer oscuro aquí, o excesivamente cálido.

Técnicamente, tanto en resolución como en escena, deja claramente por detrás al Elear, y me atrevo a decir que también, en menor medida, al antiguo Clear. Esta diferencia ha ido en aumento a medida que el auricular se soltaba en su rodaje, y finalmente, una vez acostumbrado a ella, la vuelta a mi ahora humilde Elear se ha hecho más dura de lo esperado.

Creo que Focal ha querido aportar al nuevo Clear un carácter más amable y menos neutro, que sea más versátil con cualquier grabación y que permita disfrutar de la música de una forma menos agresiva y más relajada y elegante. Y, por lo que recuerdo, lo consigue. Incluso creo que se puede decir que ha logrado mejorar ligeramente diferentes aspectos técnicos: la extensión y profundidad en el grave, el cuerpo en los medios, con un carácter más físico y presente y la resolución por arriba.

En otros apartados, sin embargo, podemos considerar al Clear original más equilibrado y neutro, y quizá, según recuerdo, con una presentación algo más tridimensional y no tan directa en la gama media. Será por tanto una cuestión de gustos el decidirse por un modelo u otro. Para los aficionados más veteranos diré que esta actualización me recuerda un poco lo que hizo Sennheiser con su serie 600 al sacar al mercado el hd650, aunque de forma algo más sutil: dar un carácter más musical y cálido a un auricular con el que habían logrado un balance tonal casi inmejorable. A mí siempre me ha convencido más el hd650, pero es sencillamente una cuestión de gustos.

Además de lo dicho hasta ahora me gustaría destacar una cualidad de estos auriculares, y en general de esta marca, en la que creo que marcan la diferencia con la competencia actual del mercado. Se trata de la extrema dinámica y limpieza de todo lo que reproducen. Es una de las cualidades en la que más se han centrado los fabricantes en los últimos años, y donde más se nota la deferencia respecto a los modelos topes de gama de generaciones anteriores.

En el caso de Focal, y concretamente en el Clear MG, el resultado es sencillamente extraordinario. Todo lo que se reproduce queda perfectamente definido con una limpieza y carencia de grano perfectas. Y además en toda la gama de frecuencias, sin distinción. Los detalles son muy delicados y físicos, se sitúan en la escena con una nitidez altísima, y en cierta medida consiguen golpearnos como si de un sonido de cajas o de un transductor más grande se tratara. Se toma verdadera consciencia de esto cuando comparamos el resultado con otros modelos de la competencia: de repente encuentras que suenan indefinidos, como sucios por comparación. Esta intensidad es tal que en ocasiones puede resultar incluso apabullante, y en más de una escucha a alto volumen he necesitado una pausa para tomar un respiro y ser realmente consciente de la calidad y realismo de lo que estaba escuchando.

En cuanto a combinaciones con la amplificación, he podido probar el Clear MG con diferentes equipos, tanto estacionarios como portátiles y semi-portátiles, y también en la configuración balanceada. El Clear MG es muy fácil de mover, se le saca prácticamente todo su potencial desde un simple iPad, para que nos hagamos una idea. Y por aquí debe ir la idea de haber sacado un cable SE tan corto en longitud. Es un auricular muy sensible, y con algunos equipos apenas he podido empezar a subir el volumen para encontrar mi punto cómodo de escucha. Además, su presentación tan directa hace que apetezca más escucharlo a volúmenes bajos.

El equipo con el que más ha acabado gustándome es el Musical Fidelity MX-HPA. Pero en general creo que se puede decir que con cualquier equipo puede disfrutarse sin problemas. Creo conveniente, eso sí, recomendar un equipo lo más neutro posible y que sujete bien el grave, ya que el Clear MG se muestra generoso por abajo. Conectado a equipos de cajas, como es el caso de mi Arcam A90, el resultado es asombroso en escena y calidad tímbrica. A veces me ha hecho dudar de si con él es necesario un equipo estacionario y dedicado, tal ha sido su rendimiento. Siempre encontramos un punto extra de precisión y de control con los equipos de gran nivel que marca la diferencia, pero reconozco que en este caso un buen resultado es tan fácil de lograr que puede bien ocurrir que, a pesar de que se pierda un poco en lo técnico, uno acabe por preferir el resultado de un equipo de cajas o más humilde por pura sinergia.

Con fuentes portátiles y teléfonos móviles se muestra también tremendo en todo lo que he probado. Es algo que ya otras marcas han conseguido y una tendencia natural en casi todos los modelos actuales, aunque sean todo un flagship de cada marca.

CONCLUSIÓN

Focal ha remodelado su modelo más valorado, el Clear, con un movimiento ligero hacia lo musical y cálido. Se enfrentaba a retocar un auricular que, en origen, ha sido considerado como un purista en su balance tonal, y ha querido diferenciarlo sin perder sus virtudes generales. Es un cambio que se puede percibir tanto en lo sonoro como en lo material, como si con su presencia física quisieran darnos una pista de lo que nos va a ofrecer su sonido.

De esta forma el nuevo Clear MG se muestra como un verdadero gigante en lo técnico, y además como un auricular tan musical y versátil que podría, sin ningún género de dudas, ser el único auricular para cualquier aficionado, incluso de los más exigentes. Fácil de mover, permisivo con las grabaciones y con una capacidad dinámica tremenda, permite disfrutar igualmente de una composición clásica compleja y de un disco de rock de los años setenta grabado de forma dudosa. Y el verdadero mérito reside en que ambas cosas las hace a un nivel extraordinario. No se siente en ningún momento que uno deba renunciar a nada en ningún sentido como aficionado al audio, ni al timbre natural, ni a la dinámica, ni a la musicalidad. He conocido antes auriculares tremendamente versátiles, pero ninguno a este nivel de conjunto. Si tuviera que empezar de cero en la afición, sin duda, buscaría algo así.

Gracias a todos por haber llegado al final de este análisis. Espero que nos veamos pronto.

Focal Clear MG – 1499€

Distribuye SIT&B

EQUIPO USADO DURANTE LA PRUEBA

  • Auriculares: Focal Elear, Sennheiser hd800, hd600, hd650 y hd540 reference II, Grado Rs1, Philips Fidelio x2, AKG K501.
  • Amplificación: Rudistor Rpx100, Musical Fidelity Mx-Hpa, SPL Auditor, Benchmark DAC1 USB, Arcam A90, toma de auriculares del cd Marantz SA8003 y del Marantz NA7004, iPad 2, iPad mini 1.
  • Fuentes: Benchmark DAC1 USB, Marantz SA8003, Marantz NA7004, Primare cd31.

CARCTERÍSTICAS TÉCNICAS:

  • Tipo: Auriculares circumaurales de respaldo abierto.
  • Impedancia: 55 ohmios.
  • Sensibilidad: 104dB SPL / 1 mW @ 1kHz.
  • THD: 0,25% @ 1kHz / 100dB SPL.
  • Respuesta en frecuencia: 5Hz – 28kHz.
  • Controlador del altavoz: Cúpula de magnesio de 15/8″ (40 mm) en forma de «M».
  • Peso: 450g (50,7lbs).
  • Cables suministrados: 1 cable de minijack de 1,2 m con adaptador de jack de 6,35 mm. 1 cable XLR de 4 pines de 3 metros. 1 adaptador de jack, 1 1/8″ (3,5 mm) hembra – 1/4″ (6,35 mm) macho.
  • Estuche de transporte incluido: 250x240x120mm.
  • Opcional: un soporte que permite exhibir los auriculares Clear Mg en interiores.

 

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