GAUDER AKUSTIK BERLINA RC 7
La penitencia del homo audiofilus
La escucha de unas cajas acústicas de alto nivel en unas condiciones adecuadas siempre ha sido un problema para aquellos que compartimos esta afición. En estos casos influyen muchos factores, por tanto quien finalmente se decide por comprar unas cajas definitivas debería oírlas en su propia sala y, a ser posible, tranquilamente, con diferentes discos y en diferentes días/estados de ánimo. Pero la realidad es muy diferente, y al igual que la mayoría de los amantes de la reproducción musical sin compromiso, mi primer contacto con unas cajas de altos vuelos se dio en una exposición. Huelga decir que para alguien que no reside en una gran ciudad es prácticamente imposible acceder a este tipo de productos, pues a finales de los noventa muchos establecimientos se dedicaban a la gama media y al por entonces incipiente mundo del Home Cinema, y pocos eran los que se aventuraban a tener en exposición productos de muy alta gama. Por tanto era prácticamente imposible oír una demostración de un equipo “gordo”, si no era en algún evento patrocinado por los distribuidores o en alguna exposición.
Mi ocasión llegó en octubre del 98 con motivo de la celebración de la última edición del Sonimag, la por entonces gran exposición de Audio y Home Cinema española. Aquel año acudí a la cita en Barcelona y tuve la oportunidad de escuchar los mejores sistemas de audio del momento. Estaban presentes todas las grandes marcas de la mano de sus distribuidores, aquello era lo máximo para un joven audiófilo de provincias, que a lo máximo que había llegado, era a la escucha de algún componente que rondaba el millón de las antiguas pesetas. No he de ocultar mi decepción por los resultados obtenidos, pero aquella fue mi primera toma de contacto con los monstruos del audio.
Cierto es que nadie va a llevar a nuestra casa una caja de ochenta kilos sólo por darnos el placer de comprobar cuál es su comportamiento en nuestra sala, entre otras cosas porque quizá no contemos con medios para adquirirla. Así es que el resultado final se encuentra entre la inquietud de la escucha en ferias y exposiciones y la esperanza de que alguna vez nos pertenezcan y los podamos hacer funcionar a la perfección en nuestra instalación.
Pero tocaron fin mis penalidades, ahora es la montaña la que viene a Mahoma. Ya están las cajas de altos vuelos en mi sala, sólo para mí, para poder machacarlas, poner los discos que yo quiera y evaluar de verdad cual es su resultado en una sala real, la mía. Ya se han dado las condiciones esperadas así que manos a la obra.
Ingeniería alemana
Tal como reza el slogan de alguna marca de coches, estamos ante una verdadera obra de ingeniería. Tanto por su construcción, componentes y diseño, la Berlina RC 7 es un producto elaborado por y para los amantes de la música, en el que se han utilizado los recursos tecnológicos más avanzados del momento. Lo primero que llama nuestra atención es su belleza exterior, la RC 7 combina a la perfección el frontal mate de pizarra, con su estructura de anillos superpuestos en acabado high gloss.
Una de las novedades más importantes de este modelo es la construcción del recito, su creador lo llama “Rib Construction” y consiste básicamente en la superposición de una serie de piezas de madera moldeada de 38 mm unidas mediante una fina sección de fibra y silicona de 3 mm, estando finalmente todo el conjunto sujeto mediante seis barras roscadas, logrando así una rigidez extrema. El objetivo es eliminar las vibraciones y coloraciones presentes en los recintos tradicionales, para ello se utilizan ocho tipos diferentes de “costillas”, variando su grosor y evitando las paredes paralelas. Además se incorporan nervios intermedios para aumentar la rigidez de las paredes. Finalmente existen dos costillas sin perforar, una separa el recinto de bajos del de las frecuencias medias y altas y la otra el gabinete de graves del recinto del filtro. Un detalle no menos importante reside en lo práctico de las puntas de desacoplo, alojadas en la parte inferior de la caja, están dotadas de unas roscas que sobresalen lateralmente, lo cual facilita notablemente la nivelación de los altavoces.