Hágase la luz
A menudo hemos usado en nuestro rincón de lectura una lámpara específica para iluminar ese espacio para nuestro libro favorito, y vemos cómo gradualmente, casi sin darnos cuenta, nuestra vista va acostumbrándose a ese espacio iluminado sin percatarnos de que dicha lámpara se haya encendida. La sensación de luminosidad del Compact 300B es excelente nada más empieza a sonar. Todo se abre de forma trasparente, nítida y da la sensación que de la lámpara podría incrementar su luz si quisiéramos, invitándonos a formar parte de un gran espectáculo.
Como he comentado antes y a diferencia de la primera sensación en la escucha de otros productos de corte similar, la claridad es manifiesta y en particular destaca la zona media por esta característica, así como por su textura y su neutralidad. Sin embargo no existe el menor atisbo de brillantez o de carácter excesivamente analítico.
Seguimos escuchando y todo está ahí, cada pequeño detalle de cada instrumento es perfectamente perceptible. Tal vez esta sea la primera vez que escucho una zona media tan transparente, y al mismo tiempo con el virtuosismo necesario para arropar a la música con ese carácter cálido propio de las amplificaciones a válvulas. Si lo buscan lo encontraran, pero no esperen ninguna dulzura o amaneramiento en al cuerpo principal de la música, que a mi juicio, se mantiene muy neutro.
Control y contundencia
Hay una grabación que desde hace varios años me acompaña en casi todas mis escuchas por lo reveladora que me resulta a varios niveles. Se trata del disco de Gloria Estefan «Mi Tierra». Una