La sala 2 situada en el centro de las otras, disponía de unas mayores dimensiones y de ellas se vieron favorecidas las cajas acústicas German Physiks Borderland IV. Fue un espectáculo ver como la magnífica dispersión de la gama media y alta de las cajas alemanas, llenaba la sala en su totalidad, recreando una escena sonora sublime en tamaño y credibilidad. La electrónica de Allnic Audio supuso un acierto amplificando las cajas, demostrando un elevado nivel de silencio y transparencia, por otra parte imprescindibles en cajas tan resolutivas como estas. Resolución que llegó a cotas de asombrar a los asistentes, gracias en parte a la transparencia que ofrecen los cables Element 47 con su modelo de referencia Black Master.
La fuente analógica volvió a ser protagonista al igual que en la sala anterior, y es que el nivel de los previos de fono que acompañaban a los giradiscos expuestos fue impresionante. Si el previo de fono Vitus Master Piece puede considerarse sin duda uno de los mejores del mundo, el Allnic Audio H3000 demostró también su alto nivel. Las frecuencias graves, en mi opinión uno de los puntos más relevantes en el sonido de las Borderland IV, resultaron más articuladas y con pegada que nunca, a través del plato Dr. Feickert Firebird y su brazo Triplanar Ultimate de 12″ -que por cierto es toda una novedad, y absoluta belleza-.
Sin complejos con las fuentes analógicas expuestas, pudimos disfrutar de la exclusividad y calidad sonora indiscutible del conjunto digital de cuatro chasis, DCS Vivaldi, especialmente seductor sobre el nuevo rack de la firma española Terpsicore modelo 7000.
