¿Deberíamos plantearnos periódicamente los aficionados a la hi-fi, el sentido y la verdadera finalidad de nuestra afición? Conozco un buen puñado de personas – por supuesto entre los que me incluyo -, que parece que amamos más los instrumentos que elegimos para alcanzar la finalidad para la que están diseñados – escuchar música por supuesto -, que disfrutar de este acto en sí mismo. ¿Qué nos mueve entonces a continuar este camino sin fin hacia delante?, ¿podemos hablar de coleccionista puro y duro o de una insensata e imposible búsqueda sin fin de la perfección sonora?
El protagonista de este artículo, Gabriel Quesada, Gaby para los amigos, es un aficionado a la hi-fi como obligación, y a la música en general como pasión. Su manera de acercarse a la hi-fi, ha sido entendiendo que este medio es el único que le permite escuchar su música de la mejor manera posible, es decir como un instrumento para alcanzar su nirvana.
Una vez teniendo cubierta esa necesidad, pues su sistema de sonido suena tan bien, que incluso podría resultar inimaginable para la mayoría de aficionados avanzados; no se plantea más cambios que mejorar su fantástica discoteca, buscando no más cantidad, sino seleccionando más las versiones y grabaciones, que aumenten la calidad musical de la misma.
Me siento afortunado por haber estado en su sala, y haber sido agasajado con la audición tan inolvidable que me regaló. Para esto Gaby es un auténtico profesional, y además de poder escuchar los discos que llevaba conmigo, me tenía preparado un menú degustación de delicatessen audiófilas insuperable.
En un entorno muy cuidado, reclinado en su comodisimo sillón, completamente a oscuras, mi anfitrión fue pinchando disco tras disco, a cada cual más magnífico, teniendo memorizado el track a escuchar y el volumen perfecto de cada uno, para que el resultado fuera el mejor posible. Y lo fue… Calificaría este sistema, por su adictivo y magnífico sonido, como el mejor optimizado de cuantas instalaciones haya escuchado jamás. Por lo que cuesta este equipo, es muy difícil obtener el resultado que pude apreciar, casi pellizcándome para comprobar que no soñaba, dinámica, timbre, naturalidad… pero sobre todo una sensación de estar a solas la música y uno, sin intermediarios ni artificios, sólo realidad.
Hablemos con nuestro anfitrión:
Descripción del Equipo en su configuración actual
- Cajas: Sonus faber Guarneri Homage
- Etapa de potencia: Air Tight Atm 4
- Previo: Air Tight Atc 3
- Lector de cd: Consonance Reference 2.2
- Servidor de música: Sonata micro de 500 gb y pantalla táctil de 10 pulgadas
- Cables de altavoz: Van del hul Revelation. Modulación de previo a etapa y de previo a cd : JPS Superconductor 2. Servidor al previo un modelo de Transparent básico
- Regleta de Audio Agile y mueble de Artesanía Audio.
Descripción de la Sala
La sala tiene 4 x 3 x 2.60. Parquet y cortinas para tapar una cristalera. Nada de especial.
Descripción de la discoteca
1400 cd en el servidor en formato flac y unos 5000 cds: un 80 % de jazz y clásica y un 20 % repartido en pop, rock, blues y música étnica.
¿Cuántos años hace que tuvo su primer equipo audiófilo? ¿Recuerda los componentes que lo formaban?
Mi primer equipo de verdad data del año 1996, cuando descubrí este mundillo. Las cajas eran las recien aparecidas sonus faber concertino, un lector de cd Denon dcd 2700 y un amplificador que me tocó en un sorteo de Sarte en Sonimag, pero no recuerdo el modelo ( era un amplificador británico de 80.000 pts). Cableado de Mit y un mueble Lovan.
