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HiDiamond: Shines on your system

Comencemos por aseverar que en esta afición de la audiofilia no hay capítulo que levante más pasiones y ampollas, por qué no decirlo, que el de los cables y conectores. Para algunos es una parte del presupuesto que podemos reducir a la mínima expresión, para otros se convierte en la poción milagrosa que cambiará para siempre y para bien todas las lacras de su sistema.

Por suerte también estamos los de en medio de esas dos trincheras con una oreja puesta en cada bando. Ellos nos vocean su argumentario mientras nosotros intentamos no quedarnos muy sordos ante tanto fuego cruzado. 

Los de la tercera vía somos los de la mesura, los sensatos, los que ya estamos de vuelta de haber militado en cualquiera de los dos extremos y comprendemos que un buen cable puede marcar la diferencia, pero sólo si hemos hecho los deberes con el resto del equipo y sala.

También podemos asegurar que unos cables no van a darnos lo que nuestra fuente no sea capaz de extraer del soporte, ni van a conseguir que una amplificación mediocre o calamitosamente inadecuada se convierta en un guante de seda. Además los cables no pueden hacer que un recinto y unos altavoces pequeños pasen de la noche a la mañana a convertirse en unos quince pulgadas o que las cúpulas de los drivers de agudos pasen de cañamazo a convertirse en seda del Catay. Pero sí van a permitirnos que nuestro sistema de sonido no se encuentre con un trombo en esas venas y arterias que son sus cables. 

No nos engañemos, esto lo hace cualquier cable simplemente decente. Ahora bien, lo que un cableado de calidad superior consigue no es sólo ya evitar un cuello de botella, sino que todos los elementos del sistema puedan recibir y enviar la señal con un grado de pureza tal que el sistema pueda transmitirnos su máximo potencial.  

El registro sonoro es el bloque de mármol que se nos entrega lleno de posibilidades, mas el sonido final de nuestra sala es la escultura.  Todas las herramientas, conocimientos y tecnologías de las que dispongamos nos ayudarán a que la obra, la reproducción tenga un parecido, una alta fidelidad con el original.

La firma italiana HiDiamond celebra el vigésimo aniversario de su fundación. Desde su sede en Roma diseñan y fabrican con una mezcla de esmero artesanal e ingeniería punta tanto distribuidores de corriente eléctrica hasta cables de potencia, de señales analógica y digital tanto single-ended como balanceados así como cables para cajas acústicas e incluso jumpers para las mismas. 

A la hora de testear el fenomenal arsenal de cables que el distribuidor a tenido la gentileza de prestarme para la presente reseña, me ha venido a la cabeza el genial aforismo de Antoine de Saint-Exupéry:

“La perfección se logra no cuando no hay nada mas que añadir, sino cuando no hay nada mas que quitar.” Esta magistral sentencia que se emplea tanto en el minimalismo que tanto me apasiona en la música como en la teoría de sistemas, e incluso en la biología y la energía cósmica sí me apuráis. También tiene otra más corta y minimalista aún: “Menos es más.” Así que he optado por conectar todo el set de cables HiDiamond para luego ir sustituyendo cables en la ecuación y ver en qué cambiaba el sonido del sistema. Primero empezar con el gran bloque de mármol y luego ir reduciéndolo para sacar conclusiones.

El set de cables está formado por:

  • 2 x HiDiamond Diamond 2 Power Cable de dos metros en la fuentes digital: Reproductor CD/SACD Yamaha CD-S3000 y en la analógica: giradiscos Acoustic Solid Solid Wood.
  • 2 x HiDiamond Diamond 3 Power Cable de dos metros: uno en el amplificador integrado Yamaha A-S3000 y otro sustituyendo al que lleva de fábrica la regleta Furutech. 
  • Los de interconexión HiDiamond 7 RCA de un metro y HiDiamond 2 XLR de 1,5 metros en el reproductor de SACD.
  • Por último los cables de altavoz HiDiamond 7 de 3 metros de largo.

Construcción

Estamos ante un material de auténtica referencia. Lo primero que resalta de los cables es su atractiva estética y sus acabados tan exquisitos, pero lo que diferencia a un cable simplemente decente de un gran cable es como gestiona la señal eléctrica que recibe. Un buen cable parece que no añade ni sustrae nada al sonido porque respeta la integridad de la señal, la cual puede verse comprometida por los valores de resistencia, capacitancia, inductancia que ofrezca dicho cable. Un gran cable puede dar la falsa impresión de que añade algo al sonido porque consigue que nuestro sistema suene con menos contaminación EMI / RFI, con mejor relación señal/ruido que se traduce en un mejor fondo negro. Con una menor resistencia en la transmisión de la señal se consigue menos distorsión y más dinámica y empuje.

Para crear grandes cables HiDiamond cuenta con varias tecnologías para conseguir que la señal eléctrica pase a los transductores de las cajas con la mayor integridad posible, así según su web:

La tecnología 4VRC © por la cual cuecen el cobre cuatro veces, en lugar del 2VRC que suele ser el estándar de la industria y que se traduce en una mejor pureza del cable. En dicho proceso tanto los hilos individuales como el cable ya trenzado se procesa a diferentes temperaturas durante las cuatro cocciones así se consigue un material de gran pureza.

El cobre se pone a disposición para su procesamiento en forma de alambrón (de 16 mm de sección y 100 metros de largo) extruido y calibrado hasta convertirlo en una hebra de 0,10 mm de sección para una longitud de 10.000 metros. Cuanto mayor sea la pureza del cobre, más fácil será llegar a secciones reducidas, con mayor homogeneidad sin que aumente demasiado su fragilidad. El empleo de un cable de dichas características permite una perfecta calibración de la sección, discriminando elementos especialmente en el caso de cables de potencia, donde más se reduce el diámetro de los capilares, reduciendo el efecto skin. De esa forma se obtienen filamentos de una sección tan reducida que permite una mejor distribución del grafito que se añade en los cables de media y alta gama.

Tecnología XLPE: otro material empleado ya en el apantallado del cable es el XLPE el cual cuenta con unos valores hasta 100 veces mejores que el teflón normal. Esto reduce el umbral de salida de pico y por lo tanto el obstáculo a la amplitud de la señal musical, garantizando mayor linealidad y menor amplitud de la onda sinusoidal de la base, en beneficio de la naturalidad de emisión de la señal musical.

GRAFITO: mezclado con cobre en tecnología 4VRC ©, permite bloquear el ruido generado en el interior del cable por el paso de la señal eléctrica para la obtención de una señal musical perfecta sin ningún añadido de ruido. 

Además de los materiales empleados, HiDiamond explica en su web las razones de ingeniería a las que obedece la geometría de sus cables por lo que invito a consultar su web en inglés e italiano para más información al respecto.  

También los terminales en rodio, las bananas con su sistema de bloqueo, los terminales rca de los cables de modulación así como los XLR, los conectores IECs y los schukos, todo el set tiene una factura inmaculada y un estilo tan bello como producto made in Italy que es. 

Como la aleación de cobre-grafito es tan pura y el aislante dieléctrico tan efectivo, la sección final de los cables no es tan gruesa y así evita por un lado que se pueda producir el skin effect y otras taras auditivas asociadas. Pero es que además, con la excepción de los Power 3 que sí son un poco más rígidos, el resto de cables son bastante flexibles y permiten una fácil instalación.

Sonido

Con todos ellos funcionando a la vez el sonido del sistema ha mejorado principalmente en sensación holográfica a la hora de posicionar los instrumentos en el escenario, haciéndolos más carnales aunque también los tres ejes de la escena han visto aumentar su tamaño ganando algún metro más. También hay una mejora en el fondo negro que hace que el sonido gane corporeidad en el grave, que suena más seco y preciso. La zona alta también se beneficia de esta prístina serenidad y estos tweeters de metal con cobertura de diamante suenan con un plus de suavidad y definición destacables.

Es como si le hubiesen quitado un disimulado velo al sonido o como si el escultor le quitase la tela con la que tapa la piedra y nos mostrase orgulloso su obra. No es que los cables estén cambiando gigantes por molinos, porque realmente no están agregando ni inventándose nada. Todo ese sonido estaba ahí en la fuente esperando a ser descubierto, y mi sistema lo desvela con una musicalidad y naturalidad inaudita hasta la fecha.

Valgan este par de pasajes concretos:

CD – Ambient – Alio Die & Martina Galvagni – Eleusian Lullaby

Tras el nombre artístico Alio Die está el compositor y productor de música ambiental italiano Stefano Musso, el cual estudió arte y electrónica en Milán. Más de tres décadas de carrera musical y decenas de discos editados en solitario o en colaboración con otros artistas lo sitúan como uno de los referentes de la música ambient en Europa. 

En este disco que firma junto a la cantante Martina Galvagni el músico toca el salterio, la cítara, la kalimba y el sitar, tanto en directo como en drones, loops y sus características grabaciones de campo que emplea como colchones y que desarrolla en sucesivas capas. 

Su música es hipnótica, contemplativa, introspectiva, lisérgica y hasta enteogénica. La melodía suele brillar por su ausencia y la percusión no hace la función de armazón rítmico o al menos no de una forma evidente y acompasada sino que más bien sirve para crear atmósfera.

En el segundo corte titulado “A Drone song for Alienor” la Kalimba suena frágil y sus sutilezas en los brillos son presentadas con un extra de definición y espacialidad. 

La voz de Martina suena en toda la sala. Por un lado se aprecia que sale del centro del escenario pero hay una reverb magistralmente añadida que consigue que nos arrope por la periferia de la estancia. El salterio, la cítara todo acompaña a la cantante aportando sutiles frases que nunca llegan a taparse una a la otra. Todas tienen su sitio tras la voz de Martina y algún transiente de la delicada percusión se atreve a ponerse durante un instante por delante de la cantante. Como si de una mariposa paseándose por el escenario se tratase.

¿Cómo que los cables no importan? Un álbum que lleva conmigo más de una década consigue sorprenderme nuevamente y revelarme nuevos secretos, como si el disco compacto fuese un palacio del que me hubiesen quedado habitaciones por descubrir. Es algo emocionante, mágico y evocador. Como la música de Alio Die, ni más ni menos. 

Pero no sólo de espeleología digital vive el curioso audiófilo sino que también le gusta adentrarse en las profundidades del surco analógico como si de un inaccesible río barrancoso se tratase.

LP – Dexter Gordon – A Swingin’ Affair ( Blue Note 80 Aniversario 100% analógico)

Salimos del viaje astral con Alio Die al volante de la aeronave y pasamos a escuchar un álbum del saxofonista Dexter Gordon titulado A Swingin’ Affair y que fue grabado tan sólo dos días antes de su monumental álbum Go, contando con el mismo elenco de artistas en los créditos. Un disco menos famoso aunque igual de redondo y que transmite muy buenas vibraciones.

Suena el primer corte “Soy califa” el saxo paneado en su totalidad en el canal derecho, el piano en el centro de la escena pero retrasado unos metros al fondo junto al contrabajo y la batería a la izquierda. Con esta disposición se experimenta la sensación de las grabaciones buenas de estar frente a un escenario real. De que lo que sale por las cajas acústicas no ha pasado por una inmensa mesa de mezclas donde ha sido comprimido, expandido, procesado y reensamblado hasta convertirlo en una pasta inverosímil y amorfa. Es música cruda y viva. 

Algunas notas de la batería en especial los platillos se proyectan por delante del escenario pero sin opacar en modo alguno al piano. Ya era perceptible con mi set de cables pero con los HiDiamond la microdinámica, la definición, el detalle fino, todo sube esos últimos puntos de excelencia que tan difícil es arrancarle a cualquier instalación de sonido. ¡Vaya cables, señores! ¡Vaya señores cables!

Conclusión

Menos es más. Lo ideal sería no tener que emplear cable alguno pero es un elemento del sistema que no se puede evitar y ni mucho menos descuidar. Dotar a nuestro sistema de cajas acústicas, electrónicas y fuentes de primer nivel cuando no de referencia y no prestar atención a los cables es como tener el corazón y los pulmones de Miguel Induráin, pero las venas y arterias de un fumador empedernido con obesidad mórbida. Nada bueno puede salir de ahí. 

Este fabuloso set de cables HiDiamond ha conseguido que mi sistema haya sonado varios puntos por encima de lo que me tenía acostumbrado. Pero ¿qué parte de responsabilidad ha tenido cada uno de los cables? 

Los cables de red han mejorado el fondo negro del set haciéndolo sonar más relajado pero sin matar la dinámica. En las fuentes han sido algo menos evidentes (pero también apreciables), pero es que en la amplificación y en la regleta han sido determinantes.

Los cables de interconexión también me han sorprendido gratamente. Mi reproductor Yamaha CD-S3000 suele presentar por su conexión balanceada XLR un sonido más audiófilo sin llegar a clínico, además de un mejor control de grave, mientras que por RCA hasta ahora había sonado más musical aunque a costa de perder un poco el control del grave, nada escandaloso pero si apreciable. Eso había sido así hasta que este par de cables de modulación HiDiamond 7 RCA han entrado en escena ya que han conseguido mejorar las virtudes y mitigar las flaquezas de la fuente. Claro que me encantaría haber probado a la vez unos HiDiamond 7 en XLR para que el combate hubiese sido entre contendientes del mismo peso.

Con los cables de altavoz HiDiamond 7 ha sido amor a primera aurícula. Tanta era la mejora en el sistema que he optado por dejarlos fijos a la hora de hacer el resto de pruebas, porque apenas los sustituía por mis simplemente decentes Supra Classic 6.0 se producía un calamitoso cuello de botella que hacía que los puntos de excelencia que ofrecen el resto de cables HiDiamond quedasen en meras décimas. 

Pero así de dura es la vida del testeador de electrónicas, cables y tweaks Hi-End, que cuando llega el “End” de la prueba algunas veces -y esta es una de ellas- tiene que pasar del “high” al “middle” cuando no al “low” y conformarse con lo que uno puede alcanzar. Pero si pudiese permitírmelos no lo dudéis ni por asomo: estos magníficos cables HiDiamond no salían de mi sala ni con una orden judicial.

HiDiamond 7 Cables altavoz 3m – 1330€

HiDiamond 7 RCA 1m – 800€

HiDiamond Diamond 2 Cable Red Eléctrica 2m – 270€

HiDiamond Diamond 3 Cable Red Eléctrica 2m – 580€

Distribuye DASHaudio

EQUIPO UTILIZADO PARA LAS PRUEBAS

Fuente Digital

  • Reproductor de CD/SACD Yamaha CD-S3000
  • iMac mid 2007 Core 2 Duo 2,4 GHZ y 6 gigas RAM DDR3 con disco duro interno SSD para sistema operativo y software
  • Macbook Pro Retina Early 2015 con Intel Core i5 a 2,9 GHZ 8 GB de RAM DDR3 a 1867 MHZ y disco duro interno SSD de 500 GB
  • Disco duro Western Digital My Passport Ultra 2,5” y 2 tB para biblioteca musical

Fuente Analógica

  • Giradiscos Acoustic Solid modelo Solid Wood con Brazo Rega RB-303 y cápsula Ortofon MC-3 Turbo

Cableado y otros

  • Rack marca Rogoz modelo 4QG3 
  • Base para giradiscos de granito de 3 centímetros montada sobre 4 silent-blocks
  • 2 Bases para cajas acústicas de granito de 8 centímetros montadas sobre 6 silent-blocks
  • Regleta Furutech e-TP80e con cable de corriente Furutech G-314AG-18E
  • Cables de altavoz Supra Classic 6.0 en bicableado con bananas Qed Airlock de 4mm crimpadas en origen en ambos extremos
  • Cables de altavoz QED Silver Anniversary XT / CF con bananas Qed Airlock de 4mm crimpadas de origen en ambos extremos
  • Cable de corriente Furutech G-320Ag-18-E en SACD
  • Cable de corriente Cardas Golden Power Cord en Amplificador
  • Cable USB Audioquest Carbon en Macs / SACD
  • Cables de modulación RCA Groneberg Quattro Reference
  • Cables de modulación RCA Ortofon
  • Cables de modulación XLR Hivilux

Sala dedicada de 22 m2 acondicionada acústicamente con alfombra gruesa de lana natural,  cuatro paneles de fibra de vidrio de 50 mm marca EQ Acoustics situados en la pared tras el punto de escucha. 2 Paneles de poliéster de 100 mm marca EQ Acoustics en la pared de fondo. 2 Paneles de lana de roca de 150 mm en la pared de fondo y dos difusores cuadráticos de tipo residual marca T.Akustik modelo SC Diffusor. 5 difusores 2D marca T.akustik modelo Spektrum D20 en la pared de las cajas acústicas.

Ocho trampas de graves marca Auralex modelo Lenrd. Cortinas gruesas muy rizadas y doble cierre de aluminio con rotura de puente termoacústico. 2 trampas de graves de membrana marca Hofa modelo Baby tras el punto de escucha. Trampa de graves de lana de roca de 80 kg/m3 de densidad de 200 cm x 35cm x 70 cm.

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