Monitores muy refinados
Fabricante británico de altavoces, Kudos Audio tiene detrás de sus productos al diseñador Derek Gilligan. Antes de contar con él y dedicarse a los altavoces, fabricaban soportes para ellos y muebles HiFi. Gilligan cuenta con una importante experiencia en el mundo de la música profesional: como miembro de una familia dedicada a fabricar recintos, músicos profesionales, y con muchas horas detrás de una mesa en un estudio de grabación o en actuaciones en directo. Diseñó productos antes de Kudos pero en esta marca es donde desde hace más de 25 años han encajado todas las piezas del puzzle que le han permitido sacar los productos que siempre imaginó.
Kudos cuenta con una gama que empieza en las sencillas columnas X y alcanza hasta las impresionantes Titan –tres modelos de alta gama–. En la gama media están las Cardea: dos monitores y dos columnas, que son realmente dos modelos pero en versión normal y mejorada. Precisamente probamos por gentileza de AudioElite, su nuevo importador y distribuidor en España, los monitores Super 10A, que son la versión mejorada de sus hermanos C10. Los C10 tienen un precio de venta al público de 3.895 euros y estos Super 10A que probamos cuestan justo mil euros más. Hablando del precio, conviene preguntar al importador pues mantenía una oferta de lanzamiento y además interesantes condiciones de financiación.
Construcción
Los monitores de la serie Kudos Cardeas, los C10 y Super 10, se presentan como una compacta caja de 350 mm de alto, 200 mm de ancho y 270 mm de profundidad, y pesan unos 9 kg. Están realizados en MDF de alta densidad y un espesor notable –18 mm– y cuentan con una salida bass réflex trasera que como veremos afecta bastante a la hora de colocarlas. Las cajas pueden estar acabadas en color liso –blanco o negro– o chapadas en madera –cuatro acabados posibles–. La sensación es de caja de calidad, bien realizada y terminada, aunque sin ninguna “floritura”… muy al estilo británico. Las cajas vienen con rejillas protectoras, a base de madera con tela pegada, que se sujetan con imanes a tres de los seis tornillos del woofer. La verdad es que las rejillas en sí y la forma de sujetarlas me pareció que no hacía honor a una caja de este nivel. A su favor, que se quitan y ponen muy fácilmente: quien necesite proteger los drivers de dedos curiosos las agradecerá y, para los demás, guardadas se quedan.
Los drivers en sí son fruto de la buena relación del fabricante SEAS con Kudos. El tweeter es la estrella de la gama, un SEAS Crescendo K2 con especificaciones especiales. Es un altavoz de agudos de cúpula textil de 29 mm de diámetro, con un potente equipo de seis imanes de hierro-neodimio por detrás, formando una cavidad antiresonante. Por delante va montado en una placa de aluminio mecanizada con una ligera carga –mini bocina–. Es uno de los tweeter de alta gama del mercado, con una excelente sensibilidad –cerca de 93dB– y que cuesta en torno a 300 euros la pieza.
El otro altavoz es, junto con el filtro, donde está la “magia” de este monitor Super 10 respecto de su hermano C10, y es que la idea consiste en optimizar al máximo –razonable– el concepto de monitor compacto. En el C10 ya se monta con un buen altavoz con cono de papel barnizado de 180 mm de diámetro. Para el Super 10 también se usa un mid-woofer con cono de papel de 180 mm, pero seleccionado y modificado. Monta en la bobina un anillo de cobre y en la punta una terminación en aluminio que ayudan a reducir la distorsión –tercer armónico– y permiten usar amplificadores más potentes al mejorar la disipación. También sirve, de paso, para lucir el logo de la compañía.
Con altavoces seleccionados más estrictamente y el woofer modificado para trabajar mejor con ese excelente tweeter, Kudos ha podido usar un filtro minimalista, con cortes de bajo orden. Eso a su vez permite invertir en óptimos componentes pasivos: bobinas Mundorf, resistencias no inductivas y condensadores Mundorf Supreme, además de un cableado interior de gran calidad –usan Chord–. La foto trasera de la caja revela algo más y bastante único: unos puentes en la parte superior del filtro. Sirven para desactivar fácilmente el filtro pasivo y poder así atacar directamente tweeter y woofer en un sistema activo, para lo que necesitaríamos lógicamente un filtro activo y dos etapas de potencia por caja. Es algo que Kudos recomienda abiertamente como “upgrade” a sus cajas de gama media y alta, y de hecho tiene acuerdos con especialistas en esto como Linn o Devialet.
La herencia del audio profesional de su diseñador Derek Gilligan tiene en esto –recomendar amplificación activa– bastante que ver. También, en que ajusta sus altavoces a oído: las mediciones sirven para corroborar que el diseño es correcto y no hay fallos graves, pero es escuchándolos y haciendo pruebas intensivamente como se acierta con un altavoz que, al final, escuchará un amante de la música y no un sistema de medición. Su recomendación en cuanto a la posición cuando los instalemos será, pues, importante tenerla en cuenta, pues será así como se habrán ajustado los altavoces. No recomiendan dirigirlos directamente al punto de escucha: según la sala y el gusto, o bien se dejan paralelos a las paredes o bien muy cruzados con el punto de convergencia por delante del de escucha.
