Peter Zak “Nordic Non” SteepleChase Productions SCCD 31744
¡Cómo me gustan las realizaciones del sello Danés SteepleChase! Siempre destacan por su magnífica calidad de grabación, tanto en CD como en vinilo – aunque éstos últimos en prensaje de 180 grs. son mi debilidad -.
El pianista norteamericano Peter Zak, cuyos inicios en la música estuvieron relacionados con estudios de piano clásico, comenzó a colaborar con SteepleChase Records en el año 2005. Durante estos años ha publicado una buena serie de trabajos, siete para ser exactos, siempre maravillosamente acompañado en la sección rítmica, por músicos de la talla de Al Foster, Paul Gill o Quincy Davis entre otros muchos.
En su octavo álbum repite su última formación, que tan buenas críticas recibió en su anterior trabajo Down East, compuesta por nada más y nada menos que Peter Washington al bajo y Billy Drummond a la batería.
Si unimos este acompañamiento de lujo a la maestría al piano de Peter Zak, no podemos encontrarnos nada más que un disco magnífico, en el que se alternan algunas composiciones del mismo Peter Zak con temas de diversos intérpretes, ya algunos convertidos en estándares.
Nordic Noon es un álbum redondo, donde Peter Zak nos da una lección de cómo interpretar el piano conjugando sus grandes dotes virtuosas, con suma elegancia y una aparente falta de esfuerzo digna de destacar. La música de este trío nos atrapa con un sonido fresco alegre y vivo, pero no carente de sentimiento y reposo, que logran exhibir en temas como So Sweet My Little Girl, donde nos sentimos abrazados por la música e invitados a apagar la luz y disfrutar de una copa solos o mejor con nuestra pareja.
Pero ojo, Nordic Noon no es principalmente un disco de carácter relajado y tranquilo. En él encontraremos muchos temas con un elevado ritmo, donde la velocidad de digitalización de Peter Zak y de sus acompañantes se evidencia, pudiendo destacar el gran sentido del tempo y el dominio que demuestran de diferentes estilos de jazz, lo que convierte éste en un trabajo variado, que no dejará indiferente a nadie.
Sin duda este último trabajo de Peter Zak se convierte en compra obligada para los amantes de un jazz moderno, de muy alta calidad y con una toma de sonido de primer nivel.
