PATHOS AURIUM
SONIDO ITALIANO PARA AURICULARES
Como se deja entender en el título del artículo, Pathos es una marca italiana. En lo que llevo de afición al audio he podido probar varios equipos italianos de cierto nivel, y debo reconocer que siempre me han agradado. Algunos, reconozco, incluso cautivado. Creo que se puede encontrar cierto aire común en todos ellos, algo así como una escuela sonora en la que predomina la suavidad y la elegancia. No he encontrado un sólo equipo italiano con carácter incisivo o frío. Suelen ser equipos de corte cálido, con gran musicalidad y con un grado de naturalidad y refinamiento bastante elevado. Firmas como Rudistor, Audio Analogue, Sonus Faber o incluso la más reciente M2Tech pueden servir como ejemplo de lo que comento. Incluso esta última, de la que hemos realizado un artículo recientemente, y que tiene un estilo particular y algo diferente al resto de las citadas, también comparte ese punto musical y refinado del que hablo.
Pathos fue fundada en 1.994 a partir de un diseño de amplificador (el TT) considerado como uno de los más logrados de los últimos años. De gran éxito comercial y con una crítica favorable casi unánime, ha dado lugar a diferentes líneas de producción, adaptándose a distintas necesidades del mercado. En este caso, con el Phatos Aurium se ha adaptado esta tecnología a un amplificador de auriculares, solucionando el reto de reducir su diseño a un tamaño menor manteniendo su alto rendimiento. Circuito en pura clase A, con previo a válvulas, etapa de potencia most-fet y cero feed-back, presume de rendir 3,6 w a 32 ohms y ser capaz de mover cualquier auricular del mercado sin problemas siendo fiel a los principios de la marca: exquisita musicalidad, transparencia, dinámica y total carencia de cansancio auditivo. Después del tiempo que lo he podido escuchar puedo adelantar que a mí me han convencido.
Calidad material y manejo
Me considero un aficionado bastante exigente en este apartado. Creo que es algo muy importante. Intento, no obstante, ser razonable en los diferentes enfoques de los fabricantes a la hora de plantear el diseño de un producto. Siempre y cuando exista cierta coherencia interna en la idea, admito ciertas concesiones en aras del diseño o del enfoque comercial, pero cuando veo algo que no se corresponde con el sector o el precio del equipo me parece importante y honesto comentarlo.
En este caso voy a poder describir el Pathos Aurium con cierta tranquilidad. Creo que la calidad material de este amplificador está por encima de lo que se suele uno encontrar en su sector. Nada más sacarlo de la caja ya se nota solidez constructiva y, sobre todo, elegancia. Buenos materiales, rigidez, peso, excelentes remates en la parte inferior y trasera… buena primera impresión.
Pero el Aurium va más allá. Los acabados están muy estudiados, y en mi opinión, con muy buen gusto. La caja es metálica, con planchas de 4 mm de espesor salvo en el frontal, de mayor grosor como es habitual, llega a los 7,5 mm. El acabado superficial es satinado, con cierto granulado como si hubiese sido pulverizado con metal para evitar reflejos o suciedad por marcas de huellas y otros roces en su manejo. Acabado en dos tonos de gris, todas las partes de su diseño, como las perforaciones (que no rejilla), las aperturas de salida de las válvulas, sus protecciones, están perfectamente cuidadas y rematadas. No sólo obedecen a razones funcionales, sino también de diseño en todo momento, y realizado con bastante estilo. El nombre de la marca está grabado en grande en la tapa superior. Los leds de función no son sólo unos puntos que te deslumbran, su luz está perfectamente difuminada, al estilo del acabado superficial. Son claros y se integran perfectamente en el diseño del conjunto sin resultar molestos. El Pote del volumen es un cilindro hueco con un acabado en material vítreo en su interior, y su superficie es estriada de forma bastante contundente para facilitar su manejo, que es suave y puede realizarse sin problemas con un dedo. Las patas de apoyo son de generoso tamaño, y su base es de material de goma antideslizante: se puede conectar el auricular sin que se mueva nunca. Hasta la parte posterior, de escasa visibilidad, está realizada en un material vítreo de color negro, igual al del interior del pote del volumen, y las serigrafías están cuidadas también. Las conexiones son de buena calidad. En fin, es fácil perderse describiendo cada uno de los detalles estéticos.