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Sonido

Gracias al esfuerzo del distribuidor en enviarme un juego completo de cables, pude interconectar todo mi sistema, empleando el cable de modulación balanceado entre DAC y previo, el de modulación RCA entre previo y etapas -pues las Jadis sólo disponen de entrada RCA-, y aunque un poco cortos, pude conexionar las cajas acústicas con su cable de altavoz. En cuanto a los dos cables de alimentación, coloqué el primero en el preamplificador de línea y el segundo en el previo de fono. Tras tener todo conectado, comencé con las sesiones de escucha.

Antes que nada resaltar, que esta nueva Serie Allegro de Fono Acustica nos presenta un sonido propio, no reduciéndose a ser un sucedáneo de las virtudes conocidas en su exitosa Serie Armonico. A pesar de ello, no podemos ignorar que parte del ADN de la firma sigue presente en su interior, gozando de gran número de las bondades que hemos descrito ya en el pasado en los productos Fono Acustica. Pero entonces, ¿son mayores las similitudes o las diferencias existentes con la reconocida serie Armonico?

La respuesta a esta sencilla pregunta puede resultar un tanto ambigua, pues aunque las similitudes son mayores, las pocas diferencias existentes confieren al cable un carácter distinto, que incluso varía su equilibrio tonal, completando en cierta manera el sonido de la firma.

La mayor diferencia que percibo, es un poco menos de peso en la música y calor en su riqueza tímbrica, santo y seña que marca el inconfundible sonido Fono Acustica. ¿Podríamos referirnos a un cable que aporta un sonido un tanto más neutro que su antecesor? Reconocer eso, sería aceptar que el cable Armonico es un poco coloreado hacia el lado caliente del espectro sonoro, y ese adjetivo personalmente lo detesto. ¿Qué significa coloreado? ¿Tal vez que el saxo tenor que escuchamos tiene que sonar menos tenor y más alto? ¿Sabemos cómo sonaba el instrumento que John Coltrane asía en sus manos… con qué intención interpretaba su obra… o sea cómo quería él que sonase? Simplemente el cable Fono Acustica Allegro presenta un poco menos de intensidad en la zona medio-grave que el Armonico, y eso se ve reflejado rápidamente en una serie de aspectos fundamentales en su sonido, que paso a relatar.

La característica que más me llamó la atención de esta nueva serie, es la superior focalización de cada instrumento sobre un fondo mucho más negro que con mis cables habituales. Esta impresión se hizo más evidente, en las distintas pruebas A-B-A de cables que efectué, cuando sustituí únicamente mis cables de interconexión por los Allegro. La colocación precisa en la escena sonora de cada interprete es apabullante y se beneficia a la vez de un aumento espectacular de la densidad de cada uno de ellos. Unos instrumentos ahora dibujados con unos bordes totalmente definidos, como si enfocásemos un zoom de una cámara hasta ahora borroso, sobre un fondo negro que destila silencio y paz.

A su vez, la velocidad general de la música se ve incrementada, ganando en impacto y ataque de los instrumentos y de sus transitorios. Este efecto incrementa, aunque sea subjetivamente, la sensación de dinámica del sistema, percibiendo un nervio y carácter reactivo superior.

Igualmente la manera en que percibimos las frecuencias agudas ha variado ligeramente, aunque apostaría a que esto es fruto simplemente de haber descargado de peso levemente la región del medio-grave. Los agudos son francamente espectaculares, con extensión, detalle y el suficiente cuerpo para resultar altamente convincentes.

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