Meze Audio Elite: casi perfectos
Son, nunca mejor dicho, unos auriculares de auténtica élite, en este caso de la premiadísima, a nivel mundial, firma rumana Meze Audio. Cierto que también lo son el modelo en el que se inspiran, los ya icónicos Emphyrean, pero ya se sabe que en audio High End lo único definitivo es la verdad absoluta en la reproducción del sonido, y tal verdad, por mucho que nos acerquemos a ella, es (debe ser, so pena de que la pasión que propulsa toda innovación se detenga), por definición, inalcanzable. Con estas premisas, he de reconocer que los Elite figuran ahora mismo entre los cuatro o cinco mejores (hablo en términos absolutos, sin compromiso) productos de su clase disponibles en el mercado mundial. Son elegantemente distinguidos, están muy bien construidos (y además combinando artesanía pura con instrumental técnico avanzado) y acabados, utilizan materiales de alta calidad que aseguran una poderosa longevidad, su “mix” de concepción y tecnología es sencillamente prodigioso y suenan divinamente. Un sonido del que personalmente me quedo con la formidable visión de conjunto que ofrece por cuanto combina resolución virtualmente “electrostática” en la zona alta con medios perfectos y unos graves pletóricos de matices, todo ello en el contexto de una calidez brutal que anula por completo cualquier atisbo de fatiga auditiva.
Tecnología “planar” escalada de los excepcionales Empyrean
El 2 de marzo de 2023 publicamos un artículo titulado “Tecnología de los transductores MEZE” (https://hifilivemagazine.com/tecnologia-de-los-transductores-meze/) firmado por un servidor de ustedes en el que se comentaba con detalle lo que hay detrás del singular éxito de una marca originaria de un país poco vinculado con el universo del audio de excepción. De dicho artículo me permito copiar un par de líneas en las que Antonio Meze, alma mater de la marca que lleva su nombre, resume la justificación, por decirlo de algún modo, que hay detrás de la que ahora mismo es su realización más exclusiva: “Los Emphyrean son una verdadera de arte, y esta es precisamente la razón por la que quise que los Elite preservaran el mismo legado en términos de diseño.” Dicho y hecho, porque los protagonistas del presente análisis fueron recibidos con indisimulado entusiasmo por la crítica especializada mundial en la forma de galardones como el Premio EISA a los “Mejores Auriculares High End de 2022-2023”.
EISA, acrónimo de “Expert Imaging and Sound Association”, es una veterana (el año pasado celebró el 40º aniversario de su fundación) organización formada por publicaciones especializadas en sonido, imagen, fotografía y dispositivos móviles de todo el mundo (inicialmente sólo europeas) cuyos premios son muy apreciados por la industria y que en el caso de los Elite el jurado responsable del mencionado galardón explicó su decisión en estos términos: “Los Elite de Meze aprovechan el rompedor diseño de sus antecesores directos, los Empyrean, y lo mejora con nuevos transductores de baja distorsión, de nuevo suministrados por la ucraniana Rinaro Isodynamics. Estos transductores ligeros, ultrafinos y de doble bobina (una evolución de la tecnología magnética “planar”) garantizan que los Elite, de tipo abierto, cautiven con sus detalladas prestaciones en la reproducción de los graves y el realismo de su escena sonora y, a diferencia de muchos otros modelos de referencia, estos auriculares también son fáciles de atacar, facilitando de este modo al usuario la elección del amplificador. Completan esta verdaderamente extraordinaria propuesta en High End la soberbia calidad de fabricación de los Meze (maleta de transporte de aluminio incluida) y la obsesión por la comodidad de escucha. Una vez que usted se ponga estos auriculares, no querrá quitárselos nunca…”
Entrando ya en materia, de nuestros invitados, hay que destacar por encima de todo la presencia de un transductor que puede definirse como una evolución del que incorporan los Emphyrean, y por lo tanto también de tipo “Isodynamic Hybrid Array”: el MZ3SE. Muy sofisticado y, al igual que su “padre”, desarrollado de manera conjunta con Rinaro Isodynamics, el dispositivo en cuestión, fruto de 3 años de investigación y desarrollo en el campo de la ciencia de los materiales, sobresale por el uso de un material ultraligero de última generación en su diafragma: el Parus, construido en una película ultradelgada de polímero semicristalino orientada biaxialmente. El polímero en cuestión está fabricado a medida con ayuda de tecnología de alargamiento biaxial secuencial específicamente dedicada para el mismo, un proceso que implica estirar el polímero en direcciones transversales a temperaturas elevadas para mejorar sus prestaciones estructurales. El resultado es el desarrollo de una compleja microestructura que exhibe una fortaleza, una rigidez y una estabilidad asombrosas combinada con una masa acústica extremadamente baja, característica esta última que junto a un motor magnético en el que una agrupación de imanes de neodimio de alta potencia (campo magnético de 0’35 Teslas, un valor que permite activar de manera uniforma la totalidad del diafragma) excita un estudiado patrón de bobinas impresas en el elemento móvil dispuestas de tal modo que se concentren en la restitución de gamas de frecuencias concretas. Si echan un vistazo a la ficha técnica que figura al final del presente banco de pruebas, se darán cuenta de la sobresaliente labor de ingeniería que hay detrás de los transductores que equipan los Elite, un trabajo que, para qué engañarse, hubiera sido imposible de coronar (o hubiera implicado unos costes económicos descomunales) sin el que permitió poner a punto los antes mencionados Emphyrean.
A nivel externo, los Elite ocultan, tras un aspecto lujosamente discreto, una sana y desbordante pasión por el empleo de materiales de alta calidad, caso del tungsteno en el que están construidos los cascos y la fibra de carbono de la diadema, esta última complementada por un ingenioso sistema de sujeción en la que una cinta de cuero con “alas de suspensión” permite que el conjunto repose uniformemente sobre la cabeza del usuario incrementando por lo tanto el confort de uso y facilitando la realización (habitual en auriculares de muy alta gama) de sesiones de escucha de larga duración. Otros detalles que reflejan el nivel de perfeccionismo que hay detrás del actual buque insignia de Meze lo encontramos en el “blindaje” de las almohadillas, y por lo tanto en el aislamiento del usuario, frente a los potentes campos magnéticos presentes en el interior de los cascos, un blindaje que la firma rumana cuantifica en un 95%. Esto me permite conectar con otro “detalle” clave de los Elite: el reconocimiento de la enorme influencia que tienen las almohadillas en el sonido final, motivo por el que nuestros invitados se suministran de serie con dos opciones al respecto que responden a las denominaciones “Angled Alcantara” (en este caso la forma inclinada crea más espacio en el interior de la almohadilla, incrementando la aireación del sonido y la limpieza de los graves mejorando a la vez la presencia de la zona media) y “Hybrid Earpads” (en este caso el objetivo de la configuración híbrida empleada es encontrar el balance perfecto de la piel Alcantara perforada de la cara interior y la piel natural del exterior para rebajar el nivel de presión de graves y, de nuevo, aumentar la aireación).
La escucha: sublime
Si leen con un poco de detalle la ficha técnica de los Elite, se darán cuenta inmediatamente de que son unos auriculares “fácil” en términos de “atacabilidad” al concentrar alta sensibilidad y baja impedancia, lo que no quita que para experimentarlos como es debido se requiere el uso de una electrónica de amplificación en consonancia, que en nuestro caso fue el fantástico Uniti Atom Headphone Edition (un “maquinón”, aparte de toda una preciosidad, que además incluye conectividad a redes) de la británica Naim Audio, a la que conectamos los Meze en modo balanceado (con un cable cojonudo). En lo que a “software” se refiere, combiné viejos conocidos míos (en “Hi-Res”, por supuesto) con piezas procedentes de una biblioteca gestionada vía Roon.
Empecé con una pieza perfecta para evaluar la articulación, la riqueza de matices si lo prefieren, de las voces: el tema “Animales Hambrientos” de la española Bebe. En mi opinión, los Meze rozan aquí la perfección, con modulaciones hiperprecisas, léase lo que se podría percibir con unas Bowers & Wilkins 801 D4 o D4 Signature… precisión tonal en estado puro, para entendernos. Cambio de tercio con “There is always a choice”, del celebrado Hans Zimmer, con unos graves fabulosamente profundos que no se arrugan en ningún momento. Y otro cambio de tercio, en este caso con el magnífico “I didn’t change my number” de Billie Eilish, en el que la zona baja del espectro exhibe la elegancia suficiente para impactar sin emborronar (no perdamos de vista en ningún momento que estamos hablando de unos auriculares). Viajando en el tiempo a la manera audiófila (hablo de mis inolvidables visitas a varias ediciones de las parisinas “Les Journés de la Haute Fidelité”), la escucha del extenso (del orden de 10 minutos) tema ”Le Temps Passé” de Michel Jonasz me permitió descubrir otra (una más) virtud de los Elite: su capacidad para la escucha verdaderamente intimista, introspectiva, esa que le invita a uno a abstraerse de su entorno gracias a una fusión perfectamente calculada de voz e instrumentación.
Continuando con voces e instrumentos en clave purista, la escucha del mil veces escuchado en eventos protagonizados por el audio de excepción “No Sanctuary Here” de Chris Jones me parece simplemente prodigiosa en términos de dinámica y definición, con una presencia de la voz que corta la respiración. Ya para finalizar mi evaluación, escuché uno de esos temas con los que muchos auriculares simple y llanamente “no pueden” como consecuencia de la opulencia (extensión, presión sonora) de los graves: “Differently”, de Marian Hill. Opulencia, cierto, pero también una cálida humanidad que los Meze resuelven con ese magisterio reservad a los verdaderamente grandes.
Para finalizar
Los Elite son fabulosos en todos los sentidos (confortabilidad incluida). Si me piden una opinión en plan “cabrón/Abogado del Diablo”, les diré que, rizando el rizo, carecen de la hiperresolución en la zona alta de mis veteranísimos Stax Lambda Signature en compañía del “energizador” a válvulas SRM-1, conjunto que por lado ni de coña se acerca a las capacidades de los Meze en la reproducción de grave y extremo grave. En definitiva, estamos ante unos auriculares prácticamente “fuera de parámetros” por la extraordinaria naturalidad, riqueza y calidez de su sonido, con el añadido de que no necesitan ningún extra especial para rendir al máximo pese a que una buna amplificación nunca viene de más. Absolutamente recomendados para quienes busquen lo mejor de lo mejor… ¡y además con el plus de un precio no prohibitivo”.
Ficha Técnica
- Tipo de producto: auriculares circumaurales abiertos con cable
- Transductor utilizado: magnético plano con forma de ovalada Rinaro Isodynamic Hybrid Array
- Diafragma del transductor: Rinaro Parus (MZ3SE)
- Superficie activa/peso de diafragma: 4.650 mm2/0’11 g
- Dimensiones/peso del transductor: 102×73 mm (Al x An)/75 g
- Respuesta en frecuencia: 3-112.000 Hz
- Impedancia: 32 ohmios
- Sensibilidad: 101 dB a 1 mW/1 kHz
- Nivel de presión sonora máximo: superior a 130 dB
- Peso: 420 g
- Precio de venta al público recomendado: 4.000 euros
- Importador: www.decineaudiovideo.com
