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Sonido

Tengo que abordar dos visiones diferentes en esta review para la mayoría de los aficionados, por un lado la del propietario de un PerfectWave DAC MKI que se plantee si merece la pena la actualización de su DAC al modelo Mark II, y por otro lado explicar cómo suena este nuevo DAC  para el aficionado en general y posible comprador de una unidad. Aunque quizás la manera más detallada de relatar como suena el PerfectWave Media DAC II sea explicando las mejoras que aporta sobre el modelo anterior.

Como poseedor de un PerfectWave DAC MKI, siempre me sentí contento y satisfecho con sus prestaciones y calidad sonora, pero también era consciente de lo rápido que están mejorando actualmente las fuentes digitales. Teniendo noticias de la salida al mercado de esta actualización, sabía que PS Audio no se conformaría con presentar unas ligeras mejoras en su modelo Mark II y que los beneficios sonoros debían ser notables. Aún estando convencido de estos principios, me quedé corto en las expectativas de cuánto podía mejorar PS Audio la calidad de su DAC.

¿Cómo explicar los beneficios de esta actualización, cuando ésta abarca todos y cada uno de los aspectos sonoros que puedo evaluar? Lo más sencillo es relatar los pasos que, por diversas circunstancias di, de manera obligada en la actualización del DAC y por tanto en el descubrimiento de su nuevo sonido.

Tenía tantas ganas de disfrutar de esta evolución, que cuando recibí el kit de mejora, con celeridad me dispuse a su instalación. Ciertamente es bien fácil realizarla, y en poco más de 15 minutos tenía la placa, los fusibles y la tarjeta de memoria instalados. Me dispuse entonces a conectarlo al resto de mi sistema y cuando finalmente le di al botón de encendido, el botón con el logo de la firma parpadeó los 40 segundos de rigor, pero luego la pantalla permaneció en un completo color negro que no presagiaba nada bueno. El DAC no respondía, y tras desinstalarla y voverla a colocar en su sitio, no conseguí que el DAC despertara de su sueño. Tuve pues que colocar la antigua placa, eso sí dejando ya los nuevos fusibles instalados, para poder escuchar música, mientras consultaba con PS Audio el percance ocurrido.

Control de balance

Este inconveniente, me permitió evaluar el gran cambio en el sonido que produjo el cambio de fusibles. Es más recomiendo a cualquier propietario del modelo MKI, que por cualquier circunstancia no pueda realizar el upgrade completo al modelo Mark II, que sustituya los antiguos fusibles estándar por otros de superior calidad. Un nivel de detalle muy superior en todas las franjas audibles se presentó como por arte de magia, a su vez que se disfrutaba de una superior extensión de frecuencias.

El cambio fue importante y me permitió afrontar la espera, hasta recibir la contestación de la firma, de manera más sosegada y satisfactoria. Ésta se hizo esperar, concretamente tardaron en responderme 12 días, pienso que deberían mejorar claramente su servicio de atención al cliente, aunque en el momento en que me contestaron me dieron la solución. Consistió en algo tan sencillo como descargarme un nuevo firmware, de un enlace que me enviaron, y sustituir en la tarjeta de memoria el antiguo por el nuevo. Con la placa nueva colocada otra vez, al primer intento se instaló el nuevo software y funcionó perfectamente. Por fin pude relajarme y empezar la escucha de manera conveniente.

Ésta la inicié sin introducir ningún tipo de ajuste, ni filtro, ni tan siquiera seleccioné el NativeX, como cabría de esperar siendo éste uno de los principales argumentos del upgrade. Nada más ponerme a escuchar el primer tema, pude darme cuenta de que esta evolución era «cosa seria». La primera sensación que recibí de manera inmediata, fue la de escuchar un sistema con un sonido mucho más analógico que como sonaba anteriormente. Esta sensación auditiva, repercute más en el grado de satisfacción que podamos alcanzar con la escucha musical, que cualquier otra mejora que pueda relataros. Por sí misma ya justificaría de manera contundente realizar la evolución del modelo MKI al MKII, pero para mi completa satisfacción y la de sus propietarios no se quedó simplemente ahí. Tras esta primera impresión, no pude esperar ni un segundo más y seleccioné la opción NativeX en el panel frontal del DAC, aunque también es posible hacerlo con el mando a distancia del aparato.

Si con el upgrade instalado, pero sin la opción NativeX seleccionada, el sonido que percibí tenía un mayor componente analógico, con el NativeX actuando, esa sensación se hace todavía mayor, llegando a transmitirme la impresión de que la música se reproduce con una mayor pausa y con menos prisa y estrés.

Analizando el nuevo sonido percibido con más precisión, si comienzo hablando de las frecuencias altas, puedo resaltar una mayor extensión en los agudos, acompañado por un superior nivel de detalle y matices. A la misma vez, estas frecuencias son reproducidas sin ninguna dureza ni agresividad, disfrutamos de unos agudos líquidos y naturales que hacen que gocemos de una sensación de realismo muy alta.

Reproduciendo el maravilloso disco, y ya gran clásico entre los aficionados al jazz, Blow Up de Isao Suzuki, las frecuencias agudas que escuchamos en el tema Aqua Marine, me sorprenden por sus detalles, extensión y dulzura a la vez. ¡Qué sería de mí sin poder escuchar este disco de vez en cuando!

La franja media se ve muy favorecida por el relatado anteriormente mayor sonido analógico conseguido, junto a un superior cuerpo y presencia en la escena de cada instrumento escuchado.

La estructuración de la escena sonora es mucho mejor en el modelo Mark II, con una mayor separación de los instrumentos y una concreción espacial de cada uno, que unido a su superior relieve y detalle, hace todo esto se materialice en un acontecimiento sonoro mucho más relajado y placentero.

Dinámicamente también el modelo Mark II es bastante superior a su predecesor, y me refiero por igual a la micro dinámica como a la macro dinámica de una gran formación orquestal. Basándose en haber conseguido un nivel de ruido de fondo claramente inferior al modelo anterior, es mucho más fácil percatarse de los sutiles contrastes dinámicos, en los ataques de cada instrumento.

Por otro lado, un aspecto que no me esperaba es la apertura alcanzada en la escena sonora, tanto en anchura, como en altura y profundidad. Esto a su vez contribuye a aumentar la sensación de que las cajas acústicas desaparecieran en mayor medida, ante un escenario sonoro que las supera ampliamente.

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